La Junta de Gobierno del ICIP ha concedido el Premio ICIP Construcción de Paz 2025 a la organización siria Women Now for Development “por su labor de apoyo, protección y empoderamiento de las mujeres sirias, dentro y fuera del país, como símbolo de resistencia y solidaridad feminista frente a la violencia”.
El premio reconoce la destacada contribución de Women Now for Development a la paz, la justicia y la dignidad en Siria, un país profundamente afectado por la represión, el conflicto armado y el exilio forzado. La organización ha sido seleccionada entre una veintena de candidaturas internacionales por su labor transformadora y resiliente durante la última década.
Fundada en 2012 por la escritora y periodista siria Samar Yazbek, Women Now for Development nació como una iniciativa comunitaria para apoyar a mujeres y niñas en los primeros días de la revolución siria. Su objetivo inicial era crear espacios seguros donde las mujeres pudieran encontrarse, compartir conocimientos y experiencias, y explorar de forma colectiva cómo apoyar a sus comunidades. Desde entonces, se ha convertido en una organización feminista de referencia que trabaja tanto en zonas de guerra como en contextos afectados por el conflicto, dentro y fuera de Siria.
Durante estos trece años, la organización ha desarrollado un modelo arraigado en los valores feministas y la solidaridad comunitaria. Women Now for Development ha reforzado el papel de las mujeres en las esferas pública y privada, proporcionando herramientas, recursos y conocimientos. De este modo, la organización ha contribuido a formar una generación de mujeres que siguen resistiendo a la violencia y construyendo esperanza en medio de la destrucción.
Un enfoque centrado en las supervivientes
Con presencia en Siria, Líbano y Turquía, la organización ha acompañado a comunidades que han sufrido graves vulneraciones de derechos humanos, como asedios, desplazamientos forzados o ataques químicos. Su trabajo se caracteriza por un enfoque centrado en las supervivientes, con énfasis en la protección, la participación y el empoderamiento, y una firme apuesta por la organización comunitaria. Además, lidera esfuerzos de incidencia internacional para amplificar las voces de las mujeres sirias —a menudo marginadas en el discurso político dominante— y para exigir justicia y rendición de cuentas.
Guiada por principios feministas y con un equipo formado por activistas profundamente arraigadas en sus comunidades, Women Now for Development sigue imaginando y construyendo un futuro más justo e inclusivo para Siria.
Al ser conocedora del premio, la directora ejecutiva de la organización, Lubna Alkanawati, compartió un recuerdo: “En 2014, durante uno de los periodos más duros del asedio impuesto por el régimen de Al-Assad al este de Ghouta, nos faltaba casi todo. Mi vecina Mariam, de 65 años, cabeza de una familia de veinte personas que vivían en condiciones inimaginables, siempre se aseguraba de compartir conmigo una pequeña parte de su comida. Aquel pequeño bocado —ofrecido con cuidado y solidaridad— me ayudó a no perder mi humanidad cuando la guerra mostró su cara más cruel. Me recordó lo que significa ser humana en tiempos inhumanos.”
Alkanawati dedicó el premio “a Mariam, al equipo de Women Now for Development, que sigue demostrando al mundo cómo las mujeres pueden liderar el cambio con determinación, voluntad y pasión; y a todas las mujeres sirias que, con cuidado, resiliencia, compasión y coraje, continúan resistiendo la destrucción y construyendo esperanza.” También afirmó que recibir el Premio ICIP “es un reconocimiento poderoso al compromiso persistente de las mujeres sirias, que han resistido la violencia, creado alternativas e imaginado la justicia incluso en los momentos más oscuros. También es un homenaje a la solidaridad feminista que traspasa fronteras y nos fortalece.”
Women Now for Development ha trabajado de forma constante para asegurar que las voces de las mujeres estén en el centro de todos los procesos de construcción de paz, justicia y rendición de cuentas. La organización sostiene que no puede haber una paz sostenible sin justicia —y que no puede haber justicia ni paz sin las mujeres.
Arraigada en iniciativas comunitarias, su labor ha alcanzado hitos clave: la creación de la Red Adala en 2016; la participación en negociaciones civiles locales a través del Civil Block en el este de Ghouta en 2018; y, más recientemente, el apoyo a movimientos liderados por supervivientes que reclaman la creación de la Institución Independiente para las Personas Desaparecidas en la República Árabe Siria (IIMP).
Premio ICIP Construcción de Paz
Desde el año 2011, el ICIP otorga anualmente el Premio Construcción de Paz con el objetivo de reconocer públicamente a personas, entidades o instituciones que han contribuido de forma destacada y continuada a la promoción de la paz.
El galardón consiste en un reconocimiento público, una escultura llamada Puerta del Sol creada por el Premio Nobel de la Paz, artista y activista Adolfo Pérez Esquivel, y una dotación económica de 6.000 euros. El acto de entrega tendrá lugar en septiembre de 2025 en el Parlamento de Cataluña, coincidiendo con el Día Internacional de la Paz.