Con motivo del Día Internacional contra el Discurso de Odio, el miércoles 18 de junio, el ICIP ha coorganizado la jornada «El odio no chuta: Fútbol por la convivencia«, una iniciativa conjunta de entidades sociales e instituciones para reivindicar la cohesión social y la convivencia frente al racismo y la exclusión.

Ha sido una acción promovida por la asociación Street Soccer Barcelona, ​​pionera en el uso del fútbol como herramienta de inclusión y empoderamiento comunitario, Novact, el ICIP y el Club Deportivo Europa, el primer equipo catalán en declararse contrario al racismo, al fascismo, al machismo, a la homofobia y al bullying, que ha cedido el campo Nou Sardenya para un partido muy especial.

Una selección formada por miembros de Street Soccer Barcelona, ​​del ICIP y Novact han jugado un amistoso contra personas vinculadas al Europa, con el objetivo de celebrar la diversidad y hacer una acción colectiva para hacer frente al odio desde la acción comunitaria y el compromiso transformador. Street Soccer ha presentado su nueva equipación, diseñada con la colaboración de Top Manta, la marca de ropa social y solidaria del colectivo de manteros de Barcelona.

Los valores del deporte para la construcción de paz

Antes del partido, en las mismas instalaciones del Nou Sardenya se ha presentado la acción, en una mesa redonda con participación de Raül Romeva, doctor en Ciencias de la Educación y el Deporte y en Relaciones Internacionales; Íngrid Hinojosa y David Sow, de Street Soccer Barcelona; Luca Gervasoni, codirector de Novact, y Kristian Herbolzheimer, director del ICIP. La sesión, moderada por Eric Hauck, ex delegado del Govern en los Balcanes, ha sido clausurada por Victoria Alsina, presidenta del distrito de Gràcia.

Romeva ha explicado cómo el deporte, y el fútbol concretamente, puede ser un «vector para romper estigmas y estereotipos, para humanizar y para construir sociedades más cohesionadas» y, para conseguirlo, ha resaltado la importancia de «construir referentes en positivo», como es hoy el fútbol femenino.

Por su parte, David Sow ha destacado la contribución de Street Soccer Barcelona para la inclusión de jóvenes inmigrantes y en situación vulnerable, como personas sin hogar. «A través del fútbol la asociación genera un espacio seguro y permite tejer redes. En el terreno de juego desaparecen todas las diferencias».

En la sesión se ha puesto de manifiesto la importancia del trabajo para la paz, por parte de entidades e instituciones, y de la educación, para hacer frente a los discursos de odio.

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